miércoles, 10 de diciembre de 2008

No-regreso


Sentí la ausencia antes de la llegada,

asumí que la vida sigue para todos,

estuve danzando los mismos compases

tarareando la misma partitura

y latiendo al unísono.


Soy consciente de tu presencia demasiado tarde,

no por no echarte de menos,

si no porque la distancia no separa conversaciones ni recuerdos,

no borra imágenes ni momentos únicos

sólo diluye el día a día.

1 comentario:

Uqbar dijo...

En el gota a gota de otras rutinas.